Gustavo Yankelevich, reconocido productor y exdirector de Telefe, reveló en una entrevista que su familia está interesada en adquirir nuevamente el canal que marcó una etapa clave en su vida profesional y familiar. Según explicó, esta decisión está profundamente vinculada a su hija Romina Yan, quien falleció en 2010 y mantenía un lazo muy especial con el canal.

Una historia atravesada por el amor a Telefe

“Ro amaba Telefe”, confesó Gustavo con emoción al referirse a su hija. Y recordó que, pocos días antes de su muerte, compartieron una charla que tuvo al canal como protagonista. Esa conversación quedó grabada en su memoria como un impulso personal que hoy se convierte en motor para este proyecto.

“Me ilusiona mucho porque tiene que ver con ella. No me puedo hacer el distraído”, expresó Yankelevich, destacando el peso emocional que tiene esta iniciativa en su vida.

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida de Puente de Noticias (@puentedenoticias.sf)

Publicidad

Tomás Yankelevich lidera el proyecto

Si bien Gustavo acompaña activamente el proceso, aclaró que es su hijo Tomás quien lidera las gestiones para concretar la compra del canal, en alianza con otros grupos. “Yo lo acompaño, pero el que está empujando y avanzando junto con otros grupos es él”, explicó, destacando que se trata de un deseo compartido por toda la familia.

Más que un negocio, un homenaje

Para el productor, la posible adquisición de Telefe no es una simple decisión empresarial. “Tenemos una relación de mucho afecto y sentimiento con el canal. Estuve allí durante diez años y hoy siento que sería una forma de continuar algo muy importante para nosotros”, afirmó.

Gustavo ve en este retorno una forma de rendir homenaje a Romina, de mantener su legado vivo y de volver a habitar un espacio que fue parte esencial de su historia personal y profesional.

Así, la familia Yankelevich proyecta un regreso con raíces profundas: no solo en los medios, sino en el corazón.

Publicidad

Como en “Nace una estrella”: Camila convirtió el dolor en arte

La gala de este martes en La Voz Argentina 2025 quedará marcada como una de las más emotivas del certamen. Desde Concordia, Entre Ríos, Camila Rizo Avellaneda —o simplemente Camira, como se presenta artísticamente— llevó al escenario una historia de vida que conmovió a todos y recordó a las grandes narrativas del cine, como “A Star is Born” (“Nace una estrella”): talento, tragedia y redención a través de la música.

“Empecé a cantar a los 10 años, en concursos de talentos y eventos solidarios. Pero fue después de la muerte de mi hermano Andrés que me refugié de lleno en la música”, relató antes de subir al escenario. Andrés tenía apenas 18 años cuando fue asesinado en Concordia en un asalto: “Dos motochorros le robaron el celular y lo mataron”, dijo Camila con crudeza y templanza.

Camila y su dolor como punto de partida

La pérdida marcó un antes y un después en su vida. “Mi hermano fue el primero que confió en mí, el que me empujaba a cantar”, recordó. Esa energía fue la que la impulsó a presentarse en el reality musical de Telefe, y la que terminó emocionando a los coaches, al público presente y a millones de televidentes.

Durante su interpretación de “Amor de tres”, Miranda!, Soledad Pastorutti y Luck Ra giraron sus sillas con rapidez. Su voz, su presencia y su historia lograron algo más que una audición: transformaron su dolor en arte frente a todo el país. Finalmente, eligió como coach a Luck Ra, aunque antes vivió un momento inolvidable cantando a dúo con Soledad.

Una coincidencia que tocó el alma

Pero el momento más fuerte aún estaba por llegar. Camila reveló que la producción del programa la llamó para confirmar su participación el 28 de marzo, justo el día del cumpleaños de su hermano fallecido. “Ese día Andrés hubiese cumplido 28 años”, dijo. Como en la película “Nace una estrella”, todo pareció alinearse para que esa noche se transforme en un símbolo: de memoria, de dolor y de inicio.

Publicidad

Fe, familia y fortaleza

En la previa, Beatriz, madre de Camila, también aportó una mirada conmovedora. Consultada por el conductor Nicolás Occhiato sobre cómo seguir adelante tras semejante tragedia, respondió con sabiduría y serenidad: “Si no tuviese a Dios en mi corazón, no habría podido. Hay que transformar el dolor en amor. Si encima le sumás odio, la vida sería insoportable”.

Camila también fue clara: “La música no me ayudó a superarlo, pero sí a salir un poco del pozo. Nos salvó un poco a todos”.

Una estrella en camino

El debut de Camira fue uno de los puntos más altos en el arranque de una temporada que ya promete emociones fuertes. Con Nico Occhiato como nuevo conductor, y un jurado compuesto por Lali Espósito, Soledad Pastorutti, Luck Ra y el dúo Miranda!, el ciclo volvió a Telefe con gran repercusión.

Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida de 🎤Camila Rizo Avellaneda🎤 (@_camiraaaa)

Publicidad

El formato se renueva, pero mantiene su esencia: revelar voces con alma. Y en el caso de Camila, ese descubrimiento fue también un renacer. Como en “A Star is Born”, el país fue testigo de una historia real, cruda y luminosa: la de una joven que decidió cantar para seguir viva. Y en el proceso, nació una estrella.