Gobierno argentino ordena a prepagas retrotraer aumentos y ajustar por inflación

El Gobierno argentino dió un paso significativo en la regulación del sector de la salud privada y ordena a siete empresas de medicina prepaga a retrotraer los aumentos aplicados desde diciembre de 2023 y ajustar las cuotas conforme al índice de precios al consumidor (IPC).

Esta decisión, comunicada oficialmente por la Secretaría de Industria y Comercio, responde a un incremento promedio del 165% en las facturas emitidas por estas empresas durante el primer trimestre de 2024, una cifra que supera con creces la tasa de inflación en el país.

La medida, adoptada tras una investigación de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia, afecta a importantes jugadores del mercado como OSDE, Swiss Medical, Galeno, Hospital Británico, Hospital Alemán, Medifé y Omint. Se estima que estas empresas prepagas cubren aproximadamente el 75% de los seis millones de afiliados a servicios de medicina prepaga en Argentina.

Resolución gubernamental:

Establece que las cuotas de las prepagas no podrán superar el nivel que tenían en diciembre de 2023, con ajustes basados en el IPC a partir de ese punto. En consecuencia, se prevé una reducción promedio del 33% en las cuotas respecto a sus niveles actuales. Esto representa un alivio significativo para los afiliados, en su mayoría pertenecientes a la clase media.

El ministro de Economía, Luis Caputo, respaldó la medida. Al mismo tiempo destaca el trabajo de las autoridades de la Secretaría de Comercio e Industria en el uso de herramientas institucionales para proteger los intereses de la población. Sin embargo, la medida genera preocupación en el sector de la salud privada, que advierte sobre el riesgo de quiebre del sistema si se implementa tal como se anunció.

Las empresas afectadas argumentan:

• que la liberación de precios del sector, se estableció mediante un decreto de necesidad y urgencia en diciembre de 2023,
• que fue una decisión del propio Gobierno que ahora las responsabiliza por los aumentos,
• que la medida no solo impacta en ellas, sino también en otros actores del sistema de salud privado, incluidos los prestadores de servicios y profesionales de la salud.

Una de las principales preocupaciones del sector es la posible devolución de los montos cobrados por encima del IPC, según una medida cautelar presentada por la Superintendencia de Salud ante la Justicia. Esta situación generaría un efecto dominó, ya que las prepagas deberían solicitar a los prestadores que les devuelvan el dinero, lo que podría desencadenar en una cadena de incumplimientos financieros y, en última instancia, en el quiebre del sistema prestacional.

En resumen, la decisión del Gobierno argentino de ordenar a las empresas de medicina prepaga retrotraer los aumentos y ajustar las cuotas por inflación busca corregir distorsiones en el mercado y proteger los intereses de los afiliados. Sin embargo, su implementación plantea desafíos significativos para el sector de la salud privada, que deberá adaptarse a un nuevo marco regulatorio en un contexto económico y sanitario complejo.

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