El Banco Central de Milei elimina la tasa mínima para los plazos fijos

El Banco Central de la República Argentina (BCRA), bajo la presidencia de Santiago Bausili, ha anunciado una reducción significativa en la tasa de interés de referencia del 110% al 80% para los depósitos a plazo fijo. Esta medida, que entró en vigencia el 12 de marzo de 2024, también incluye la eliminación de la tasa mínima para los plazos fijos, lo que permite a los bancos ofrecer rendimientos según su propia evaluación.

El comunicado emitido por el BCRA explica que estas decisiones se basan en una serie de factores, entre los que se destaca una «trayectoria descendente de la inflación minorista» y una «pronunciada desaceleración de la inflación». Sin embargo, estos argumentos contrastan con las declaraciones del presidente Javier Milei, quien reconoció la posibilidad de un mes de marzo complicado en términos de aumentos.

La reducción de la tasa de interés de referencia tendrá un impacto significativo en los rendimientos de los plazos fijos para los inversores. Anteriormente, con una tasa del 110%, un plazo fijo ofrecía un rendimiento más alto, pero ahora, con la tasa reducida al 80%, los rendimientos serán inferiores.

Esta medida del BCRA se enmarca en un contexto más amplio de cambios en la política económica y monetaria del país. La desregulación de las tasas mínimas de interés busca fomentar una mayor competencia entre los bancos y proporcionar flexibilidad a las entidades financieras para establecer sus propias tasas de interés en función de las condiciones del mercado y las estrategias comerciales.

El comunicado también destaca la normalización de la gestión de liquidez a través de los pases, limitando el acceso a este instrumento a las entidades financieras reguladas por el BCRA, excluyendo a los fondos comunes de inversión.

Estas medidas han generado debate y controversia, especialmente en un contexto económico y social complejo, donde la inflación y la incertidumbre económica son preocupaciones persistentes para los argentinos.

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Los inversores y depositantes ahora enfrentarán decisiones importantes sobre dónde colocar sus fondos, considerando las nuevas condiciones del mercado y las tasas de interés ofrecidas por los bancos. La reducción de la tasa de interés del plazo fijo del 110% al 80% marca un cambio significativo en el panorama financiero argentino y tendrá repercusiones en la economía y en las decisiones de ahorro e inversión de los ciudadanos.