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Auditoría en Santa Fe: suspenden 160 comedores y merenderos por irregularidades
Comedores fantasmas y la suplantación de identidad de los titulares de tarjetas alimentarias
La provincia de Santa Fe, a través de su Ministerio de Igualdad y Desarrollo Humano, detectó irregularidades en 160 de los 400 comedores y merenderos auditados. Estas instituciones, beneficiarias de las políticas alimentarias provinciales, presentaron problemas graves, como la existencia de comedores fantasma y la suplantación de identidad de los titulares de tarjetas alimentarias.
Principales hallazgos
El secretario de Desarrollo Territorial, Sergio Basile, destacó que la auditoría comenzó en enero y reveló un desorden significativo que impedía asegurar la correcta distribución de alimentos. Más del 50% de las instituciones auditadas presentaron irregularidades.
Las más graves incluyeron comedores que figuraban en direcciones inexistentes, donde se encontraron plazas, galpones vacíos o espacios públicos en lugar de las instalaciones declaradas. También se detectaron casos de suplantación de identidad, con tarjetas alimentarias asignadas a personas que desconocían su existencia.
Medidas y reacciones
De las 400 instituciones auditadas, 160 fueron suspendidas de forma definitiva hasta que regularicen su situación. Las irregularidades más leves, como la falta de rendiciones, están siendo tratadas mediante el diálogo con las instituciones afectadas. Si estas no se regularizan, se suspenderá el recurso hasta que se pongan al día.
Las denuncias más graves, como los comedores fantasma y la suplantación de identidad, fueron presentadas a la Justicia. Hasta el momento, se realizaron entre siete y ocho denuncias en el sur provincial.
Enfoque regional
La mayoría de las irregularidades se concentraron en el sur de la provincia, especialmente en las ciudades de Santa Fe y Rosario. Esta auditoría motivó a muchas instituciones a regularizar sus rendiciones atrasadas, mejorando su funcionamiento.
Programas alimentarios
La política alimentaria de la provincia se basa en tres programas principales:
- la tarjeta institucional, que establece convenios con instituciones para la administración de raciones;
- la Tarjeta Única de Ciudadanía, que asigna montos directamente a las personas para la compra de alimentos;
- el programa social nutricional, que cubre lugares para menores de hasta 12 años. Además, se distribuyen módulos secos en situaciones de emergencia.
La auditoría de la cartera de Comedores y merenderos revela serias irregularidades en la gestión de fondos públicos destinados a comedores y merenderos. Las medidas tomadas buscan garantizar la transparencia y asegurar que la ayuda llegue a quienes realmente la necesitan.